miércoles, 24 de febrero de 2016

Camboya, la costa sur.


Después de la visita a Batdambang tomamos rumbo sur, hacia la costa del Mar de China. El centro del país es una inmensa llanura, con poco interés turístico.




A unos 400 km, muy cerca de la costa, entramos en la ciudad de Kampot.




Recibe su nombre del rio que la cruza.







Los transportes públicos son sorprendentes, como podemos ver en estas furgonetas que van cargadas a tope entre bultos y personas.







También son habituales los enormes remolques tirados por motos. Son como pequeños autobuses y cuesta creer como una moto puede con todo.







La costa sur de Camboya esta dominada en su mayoría por los manglares. Sus playas no están muy limpias ya que a ellas van a  parar todo tipo de desechos y eso hace que no sean muy apetecibles para el baño.










Los barcos de pesca aprovechan las desembocaduras de los numerosos ríos como puertos naturales.







Uno de los lugares más visitado del sur es el parque nacional de Bokor. Fue un centro de veraneo francés, abandonado en la década de 1920, situado en las montañas Bokor que se elevan por encima de los 1000 m., ofreciendo unas esplendidas vistas hacia el golfo de Tailandia.







La cumbre de estas montañas es una gran meseta donde se puede caminar entre la brumosa niebla que, casi siempre, cubre sus alturas. Así descubrimos las ruinas de una antigua iglesia católica que resistió los años de guerra y ocupación por los jemeres rojos.




En un lugar prominente, en lo alto de un acantilado, encontramos un antiguo templo budista, cubierto de líquenes de color naranja encendido, que dan al conjunto un aire etéreo.










Dentro del parque, a cinco km. al noroeste, están las cataratas de Popokvil.




Coincidimos con unos recién casados que habían elegido este lugar para su reportaje de boda.




Después de unos días con una agradable temperatura en las montañas, bajamos buscando la cercana playa de Kep para darnos un baño.




Esta población es conocida en toda Camboya por la venta de pescado.







Pero sobre todo es famosa por el mercado del cangrejo. Los mantienen vivos en el agua, metidos en nasas. El trasiego de las vendedoras es constante sacando cangrejos para su venta.







Estas playas fueron un centro vacacional de la alta sociedad en la indochina francesa de principios del siglo XX. De ese pasado todavía se conservan algunas construcciones.







Las vacaciones de la familia se acaban y tenemos que regresar a Phnom Penh, pues hemos dejado para el final la visita a la capital.







El palacio real está construido en estilo jemer clásico y es la residencia oficial del rey Sihamoni. Con sus inclinados tejados dorados, es uno de los monumentos más destacados.







La Pagoda de plata se encuentra en el complejo real con unos bonitos jardines tropicales, cerca de la ribera del Mekong.







Está rodeada por estupas que albergan las cenizas de antepasados reyes.







En un restaurante en la orilla del Mekong nos despedimos con una buena cena.




Dejamos la capital dirigiéndonos hacia la frontera con Tailandia en la costa oeste.




Unos 20 km. antes de Koh Kong, última ciudad de Camboya, se encuentran las cataratas Tatai.




Aprovechando las aguas limpias y cristalinas del rio del mismo nombre, nos detenemos unos días para hacer un poco de colada y darnos unos refrescantes baños.







Una exuberante selva bordea este tramo del rio con potentes rápidos en la estación de lluvias.







La construcción de este puente que une la ciudad de Koh Kong con la frontera tailandesa, ha contribuido a la entrada de turistas del país vecino y al resurgimiento de este rincón de Camboya.




El día 22 de octubre entrabamos de nuevo en Tailandia, por una bulliciosa frontera.




Mapas del recorrido.










Filopensamientos y otras cosas……………..

El budismo theravada define la mayoría de las prácticas culturales en Camboya. Se considera que hacerse monje tiene muchos beneficios.

Muchos hombres son monjes un corto periodo de sus vidas, habitualmente entre tres meses y tres años, y viven bajo estrictas normas.


A las mujeres se les permite ingresar en la vida monástica, aunque suelen hacerlo pasada la mediana edad, a menudo después de la muerte de sus maridos.

martes, 9 de febrero de 2016

Camboya, los templos de Angkor.


La carretera que nos conduce desde  Phnom Penh a Siem Riap es como en toda Asia, tramos de buen asfalto con tramos en construcción y otros bacheados.






Siem Riap es la capital de la región de Angkor y está situada en el noroeste del país, a 323 kilómetros de Phnom Penh.







Angkor es a su vez la antigua capital del gran imperio Jemer y sin ninguna duda uno de los lugares más extraordinarios del mundo.




Las ruinas se visitan en coche dada su extensión, pero los vehículos extranjeros tienen prohibida la su entrada. El tuk-tuk es el medio más apropiado para recorrerlas.




Este vasto complejo alberga ciudades, templos, palacios, estanques…. Nosotros comenzamos por Angkor Thom, cuyo nombre significa la gran ciudad. De hecho en su tiempo fue la mayor urbe del imperio jemer. Está protegida por una muralla de ocho metros de la altura y 12 km. de longitud.







Dentro de la ciudad destaca la extraordinaria estructura del templo de Bayon. Este simbólico templo-montaña de forma piramidal se eleva en tres alturas y posee 54 torres con más de 200 enormes y enigmáticas caras de piedra.










La visita de Angkor en época de lluvias es arriesgado, a nosotros nos cayó en este templo el diluvio universal.







Una hora después lucia un sol esplendido que nos acompaño todo el día. Cerca se encuentra el templo budista de Baphuon, al que se accede por una calzada elevada de 200 m de longitud. Construido en el siglo XI en el reinado de Udayadityavarman II.







Siguiendo nuestro recorrido, accedemos al templo Phimeanakas, conocido como palacio celestial. Tiene forma piramidal y base rectangular.




La exuberante vegetación que rodea los templos hizo  que permanecieran ocultos durante siglos.




Los templos de Angkor forman la obra maestra arquitectónica más extraordinaria del Sureste Asiático, sus impresionantes ruinas nos transportan  a un encantador y misterioso mundo perdido.










Dentro del complejo, el templo de Ta Prohm es quizás el más llamativo y curioso de todos y mantiene el ambiente que debieron experimentar los exploradores que lo descubrieron en el siglo XIX, cuando la jungla invadía este lugar y las raíces de los banianos gigantes abrazaban las ruinas.







Todos los templos están decorados con magníficos bajorrelieves que se conservan en bastante buen estado.




Llevamos desde el amanecer andando entre ruinas y es necesario un descanso, que aprovechamos para tomar algo.




Dejamos para la tarde la visita al templo más emblemático de Angkor. Angkor Wat es el monumento religioso más grande del mundo y significa “la ciudad que es un templo”.







Este espectacular monumento, construido en el siglo XII por el rey Suryavarman II, está dedicado al dios Visnú. En el centro se alza un templo con cinco torres inspirado en la flor de loto que representa el monte Meru, mítica morada de los dioses hinduistas y centro del universo.







Las intrincadas tallas de los muros del perímetro del templo son extraordinarias en especial el tramo de bajorrelieves de 600 m. de longitud y las apsaras, bailarinas celestiales.







Después de la interesante visita a Angkor seguimos circunvalando el lago Tonle. A unos 170 km. llegamos a la ciudad de Battambang, donde por una estrecha pista de tierra nos conduce al templo de Wat Ek Phnom.







El templo parcialmente desmoronado, se construyo en el siglo XI y sus ruinas estranguladas por las raíces de los arboles han sido saqueadas.




Junto a ellas se ha construido un nuevo templo budista.




En los alrededores de Battambang se encuentra el monte Phnom Sampeau, una colina con varios templos en la cumbre. Desde ella se tienen unas esplendidas vistas de las llanuras que lo rodean.







Aquí se encuentran las llamadas “cuevas de la muerte” que forman parte de la brutal historia reciente del país. Durante la dictadura de los jemeres rojos, los condenados eran lanzadas desde un tragaluz en el techo.




En el interior de la cueva, al lado de un buda reclinado dorado, en un monumento conmemorativo de cristal, se muestran los huesos y cráneos de algunas de aquellas victimas.







Alrededor de estos lugares de peregrinación y turismo, surgen multitud de puestos ofreciendo comida, recuerdos……..







Los escarabajos y grillos son un aperitivo crujiente y barato, se sirven fritos y son muy populares. Los lugareños separan la cabeza y las alas y se comen el abdomen.







Por la carretera hacia el sur, la lluvia vuelve a hacer acto de presencia inundando los campos de arroz. La luz tamizada por las nubes realza su belleza.







La actividad rural continua, unos labrando y preparando los campos y otros pescando en las recientes lagunas y torrentes.










Mapas del recorrido.







Filopensamientos y otras cosas………………….


Angkor es uno de los yacimientos arqueológicos más importantes del mundo, muchos lo consideran la octava maravilla y es sin duda un lugar extraordinario.

Durante cerca de seis siglos, entre los años 802 y 1.432, fue el corazón político y religioso del imperio jemer, que se extendió entre el sur de China y la bahía de Bengala.
Este imperio se creó por iniciativa de Jayavarman II, quien se autoproclamo Devaraja ( Rey-Dios) del territorio e hizo construir un gigantesco templo piramidal emulando al monte Meru, la sagrada y mítica morada de los dioses hinduistas. 

En los siglos siguientes sus sucesores trasladaron la capital de Rolous a Angkor y construyeron magníficos templos como Phnom Bakheng, Anngkor Wat, Banteay Kdei y Ta Prohm.

En la actualidad se pueden visitar alrededor se setenta templos, tumbas y otros edificios en un área de 200 km2.


Entre todos ellos destacan el esplendido Angkor Wat símbolo de país, que es el complejo religioso más grande del mundo.